Este jueves se llevó a cabo en el Gran Hotel del Paraguay el conversatorio regional “Participación de niñas, niños y adolescentes. Conversaciones sobre aprendizajes, interrogantes y desafíos para las redes de OSC”, con la participación de representantes de organizaciones de sociedad civil de Argentina, Brasil, Chile, España, Guatemala, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
El encuentro fue impulsado por la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA), la Red de Coaliciones Sur (RCS) y la Plataforma de Infancia, con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), KIA y la Unión Europea.
La jornada fue inaugurada con palabras de bienvenida de la directora ejecutiva de la CDIA, Cynthia Florentín, y del embajador de España en Paraguay, Javier Parrondo Babarro, quien destacó la relevancia de fortalecer los espacios de participación de niñas, niños y adolescentes para volver a tejer la red democrática.
Durante el conversatorio, integrantes de la Red de Coaliciones Sur y del Colectivo de Infancia de España compartieron experiencias significativas de participación protagónica, destacando el rol activo de niñas, niños y adolescentes en el análisis de sus propias realidades y en la creación de sus propias maneras de organizarse, incidir y comunicarse a través de diferentes formas, como materiales comunicacionales, campañas, arte, juegos, y encuentros entre partes, entre otras.
Entre quienes compartieron estas experiencias se encontraron: Florencia Vallino (Argentina), Monica Alkmim (Brasil), Alejandro Tapia (Chile), Mabel Taravilla (España), Elena Bejarano (Guatemala), Jessica Pereira (Paraguay), Cristina Prego (Uruguay) y Lorena Liendo (Venezuela).
El cierre del evento estuvo marcado por un intercambio de reflexiones colectivas sobre los desafíos actuales en materia de participación de niñas, niños y adolescentes en sus territorios y en los mecanismos formales establecidos por cada Estado.
La participación protagónica es un derecho de las niñas, niños y adolescentes, que además les permite acceder a otros derechos, formarse como ciudadanas y ciudadanos con herramientas democráticas para contribuir a sus comunidades y participar de acciones colectivas a favor de una sociedad más justa, inclusiva y sin violencias.






